Un email se vuelve viral si el receptor se siente convencido para enviarlo. A veces el receptor necesita tener un incentivo y a veces no. En ocasiones el contenido es tan intrigante, convincente, impactante o tan divertido que la gente no necesita ayuda para darle al botón de reenviar. Es habitual que nuestros amigos, compañeros o familiares nos envíen emails a menudo pero como todos sabemos sólo por que algo sea viral no quiere decir que le sirva a alguien.
Una buena estrategia de email no se enfoca en conseguir como resultado viralidad. La viralidad es positiva pero si no se traduce en última instancia en una venta o en algún acontecimiento de conversión nuestros clientes no estarán satisfechos. Un buen enfoque del e_mail viral toma la forma de “recomiéndame a un amigo”
Cuando pensamos a cerca de la viralidad gran parte del esfuerzo se centra en el contenido, la oferta y el incentivo- los cuales son importantes. Sin embargo el momento en que hacemos el envío es una pieza crítica, pero que a menudo pasamos por alto, en los componentes de la estrategia para crear un email viral. Por ejemplo, si un cliente está satisfecho, esta satisfacción hará que el participe en el programa de “envíaselo a un amigo” con más facilidad que si el está descontento con nuestros servicios.
Hay muchos indicadores que se pueden usar para determinar cuál es el momento apropiado. Por ejemplo si un visitante de nuestra Web nos acaba dar una buena puntuación a nuestro producto y tenemos su email, estos son los candidatos ideales para participar en la oferta de «envíaselo a un amigo», del mismo modo que si alguien a completado un cuestionario y nos ha dado buenas puntuaciones. Por otro lado el momento también puede trabajar en contra tuyo. Si alguien ha visitado tu página de soporte varias veces la semana pasada y ha abierto una queja o ha dado una opinión negativa de tu producto quizás es mejor dejar tu oferta de “envíaselo a un amigo” para otro momento.
Acercar el email marketing al contexto global de la estrategia de marketing directo digital (email, página Web, móvil, etc.) es también una buena estrategia. Pero recuerde, la calidad de los datos combinada con la habilidad de convertirlo en acción abre aún más posibilidades.
En resumen: los esfuerzos en email marketing pueden ser vanos si el momento no es el adecuado.